Monday, September 21, 2015

Three Cerros Challenge

A veces una idea loca puede transformarse en un reto y en un día inolvidable o una hazaña impensable. La idea de ir al valle y querer subir un cerro quedó en la locura de hacer tres en un sólo día. Como eran tres cerros, nosotros también fuimos tres:


Nikki, hiker desde hace 4 años con la Tribu Guarumo y en solitario a veces, apasionada de las montañas.

José Pérez, vallero, birder y además guía de turismo por lo que conoce muy bien el área pero jamás había hecho algo tan extremo así ;) así que no se resistió a la invitación. Su página es Birding Anton Valley

Ariel Aguirre, tourleader y birder experto, en su página pueden conocer de las cientos de aves que hay en Panamá y el arte de observarlas: Ariel Birding 

El challenge era: Cerro Gaital – Cerro Cariguana – Cerro La India Dormida



No hubo gran logística pero dormimos en el Valle la noche anterior para estar bien descansados y planeamos empezar por el más difícil: Cerro Gaital, el cual nos tomó dos horas subirlo y 1 hora y algo bajarlo. El clima es fresco y a veces sopla una brisa fría, mucha neblina, riscos, hojas filosas, uso de cables, extraña y maravillosa flora y fauna. Un cerro que nunca me deja de sorprender.








Podría escribir otra entrada en el blog completita de Cerro Gaital, el punto más alto del Valle con 1,185 msnm, pero lo único que puedo decir aquí es: VAYAN CON GUÍA, nunca solos si no conocen y aun cuando no sea la primera vez, pues hay partes que donde se debe tener mucho cuidado al ascender y descender por cuerdas (cables) y piedras resbalosas. El sendero es estrecho con precipicio a los lados, huecos, neblina, bajareques, mucho fango y la última parte de trepar rocas. Si ha habido muchas lluvias, el camino puede perderse en la recta final. Muy extremo y emocionante. La cima es amplia pero hay que tener mucha suerte si se despeja para apreciar la vista. Esa fue mi segunda vez (ahora voy por tres) y siempre le tengo mucho respeto. No me hubiera atrevido a ir sin guía, el cual esta vez fue José.








De allí, decidimos irnos por uno que José decía era ‘‘fácil’’ y corto: El Cariguana con 976 msnm (según mi wikiloc) Nunca lo había subido y me encantaron sus vistas 360° grados y los montículos de piedra que uno iba encontrando en el camino.  El clima cambió por completo y ahora estábamos a sol pelado. Ascenso en una calle empinadas con rocas sueltas, luego uno se encuentra con un letrero y toma a la izquierda pasando por un pequeño bosquecito para salir al camino que lleva a la cima, totalmente despejado y apenas comienza, brinda vistas espectaculares. Decidimos no almorzar porque conociéndonos y con el cansancio que traíamos, luego no completábamos, así que las granolas, snacks y picaritas, bebidas fueron indispensables y nunca sobraron.



Por último, la tan conocida y emblemática India Dormida. Allí hay siempre mayor tráfico de personas (en los dos cerros anteriores, no nos encontramos ni un alma) y cobran la entrada, tristemente había mucha basura en el camino. Confieso que ya estaba cansada pero teníamos una meta en la mente y había que ir por ella.
Aunque sea un sendero muy conocido y marcado, tiene sus partes engañosas y hay que saber cuándo girar y tomar a la izquierda de lo contrario (si sigues recto) quedas en un pueblo aledaño.

Algo que me llamó la atención fue la poca consciencia de algunos turistas de adentrarse SOLOS, con chancletas, shorts, sin linterna, mochila ni agua al sendero. En este caso, nos encontramos al bajar a una chica extranjera a la que le advertimos que el camino se pondría totalmente oscuro, se iba a poner más resbaloso y aún faltaban unos 40 minutos para la cima. No hizo caso y siguió. Abajo estaba su madre preocupada con la que pude hablar en alemán (casualidades), pues ni siquiera inglés hablaba y las personas de los stands no le entendían. Incluso me dijo que vio una culebra. Le dije que en caso de emergencia podría contactar al SINAPROC, aunque pienso que fue irresponsabilidad total. 




Finalmente completamos a las casi 6 de la tarde el Three Cerros Challenge con fotografías, piernas adoloridas y buenos recuerdos. 



Cariguana - Panorámica